Así como Castañeda y Adell (2013)
afirman que “siempre hemos tenido un
entorno personal del que aprendemos, aunque es probable que no hayamos sido
conscientes de él y no hemos necesitado serlo” por el hecho de había
alguien que nos proveía de la información. Hoy, frente al mundo que se nos abre
por medio de la red, la posibilidad de acceder libremente a la información, al
conocimiento, nos ha permitido aprender de una manera más autónoma. Pero no siendo
suficiente esta alternativa, el acceso a la información de la red también ha
hecho posible el compartir lo aprendido. De esa manera el propósito de la
humanidad –de mantener circulando y alimentando el saber- se mantiene.
De ahí entonces que el aprendizaje, el
conocimiento, no se desvanece o pierda su esencia por entrar a la red, por el
contrario se enriquece y se fortalece como nunca. Es cierto que algunas
visiones fatalistas y reduccionistas pueden no estar de acuerdo con el nuevo
giro que ha tenido la educación desde los nuevos conceptos de obicua (Burbules)
y expandida (Barbero), sin embargo, es la nueva realidad de la educación y a la
vez la nueva posibilidad de humanizar la máquina, es decir, de revindicar el
papel del hombre como fabricante, como creador de herramientas que se vuelven
extensiones del cuerpo tanto para protegerlo, mejorarle la calidad de vida como
para acercarlo a otros.
Y en ese deseo de fabricar para hacer
mejor la vida –ante la creación de extensiones del curso y hasta de la mente-
los PLE surgen como alternativa para continuar con la tarea de aprender,
enriquecer, transformar, crear y compartir lo aprendido. La mirada de los PLE
desde el recurso de las TIC no quita la esencia del proceso educativo;
humanizar, por el contrario, reedifica el concepto del mismo pero desde el uso
de la tecnología. De ahí que Casquero (2013) presente una definición de los PLE
como “una colección de instrumentos,
materiales y recursos humanos que el estudiante usa en un determinado momento
en el contexto de un proyecto educativo (Casquero, citando a Fiedler y
Pata, 2009)
Ante el hecho de que una persona pueda
crear un PLE a partir de sus intereses, necesidades y posibilidades, la
alternativa de crear un PLE desde las TIC es una opción que no se puede
desechar, por el contrario, es una necesidad de este tiempo que las personas
–en especial maestros y estudiantes- se apropien y sepan utilizar el saber
digitalizado. De esa manera se aprovecha al máximo el acceso a la red tanto
para la comunicación como la información. Y en la medida en que las personas
ingresan a la red no solo se conectan a las personas, también lo hacen con el conocimiento
de la humanidad.
Un PLE virtual, como “conjunto de herramientas, fuentes de información,
conexiones y actividades utilizadas habitualmente por el estudiante (Adell
y Castañeda, 2010), permite que el ejercicio no solo consista en adquirir
información, también posibilita el ejercicio pedagógico y didáctico de la
información-conocimiento que se adquiere. Ampliar las redes de comunicación a
través de los PLE desde lo virtual enriquece en doble vía: Por el acceso a la información
y la posibilidad de compartir el resultado meta-cognitivo del conocimiento
enriquecido. Es decir, quien accede a la red como estrategia debe tener claro
que a sí mismo ha de devolver a ella para ampliar lo que allí hay.
En consecuencia, y desde una posición
más bien personal, como sujeto necesitado de adquirir información, de
conocimiento, no puedo olvidar los medios tradicionales que posibilitan el
aprendizaje pero tampoco he de desconocer la riqueza académica y humana que las
TIC me ofrecen. Veo entonces frente a los PLE virtuales una inmensa alternativa
para seguir fortaleciendo mi doble necesidad; la de aprender y la de compartir
lo aprendido.
Hola Jhon:
ResponderEliminarMe parece interesante tu posición frente al manejo de la información en la red. Cuando dices: "Ampliar las redes de comunicación a través de los PLE desde lo virtual enriquece en doble vía: Por el acceso a la información y la posibilidad de compartir el resultado meta-cognitivo del conocimiento enriquecido" me remito a la postura de cope y el aprendizaje obicuo; Recordemos que una de las características de este aprendizaje es la interacción y la participación , en este sentido los PLE virtuales abren un mundo de posibilidades frente al acceso a la información y las formas de expresión, de interactuar con el mundo.